Cai Lun, el Inventor del Papel
Cai Lun fue un funcionario e inventor chino nacido alrededor del año 50 d.C. Aunque el papel apareció en China en el siglo III o II a.C., sus mejoras en la fabricación de este material lo han hecho merecedor de ser considerado su inventor. Gracias a su revolución en los procesos de fabricación, el papel pudo finalmente popularizarse y extenderse.
Estas mejoras produjeron un gran impacto en el imperio chino de su época. Dichos avances hicieron posible el rápido incremento en la producción de papel, su estandarización y el posterior desarrollo de la capacidad de registro de datos por parte de la sociedad china.
Cai Lun nació en la actual Leiyang, Hunan (conocida entonces con el nombre de Guiyang) durante el reinado de la dinastía Han Oriental. A pesar de sus orígenes humildes, acabó sirviendo como eunuco de la corte después del 75 d.C., tras lo cual comenzó a subir peldaños en la jerarquía cortesana del Emperador He del imperio Han.
Su Mayor Invención
En el año 105 d.C., a la edad de aproximada de 55 años, logró desarrollar la primera fórmula efectiva para la fabricación de papel. Realmente no partió de cero, ya que fue adaptada del método tradicional de hacer papel de baja calidad que ya era creado por la clase baja en los últimos 200 años.
No obstante, el papel alcanzó con él nuevas cotas inimaginables hasta entonces y lo hizo no sólo mejorando la mezcla química del compuesto, sino también la maquinaria que permitía una producción, prensado y secado mucho más rápidos.
Su técnica de dejar en láminas de fibra vegetal en agua y luego extraer lentamente la humedad mediante prensas hasta que el papel se secara por completo, permaneció vigente durante más de mil quinientos años, extendiéndose desde China hasta el Oriente Medio, Europa y luego el resto del mundo. Por su invento, Cai Lun recibiría cierto crédito y fama durante su vida, pero el verdadero reconocimiento vendría después de su muerte, cuando al fin se coprendió el alcance de su ingenio.
Su Legado
Su biografía, sin embargo, tuvo un triste final. Cai Lun se suicidaría mediante la ingesta de veneno después de que el emperador An de Han lograse hacerse con el trono que quedó vacío tras la muerte de la emperatriz Deng. El nuevo emperador ordenó que todo el séquito anterior de la emperatriz Deng fuera enviado a prisión, pero Cai Lun prefiró evitar ese destino terminando su vida en un ritual de envenenamiento después de bañarse y vestirse con finas túnicas de seda. Algunas fuentes sitúan el año de su muerte en el 121 d.C. mientras que otras en el 110.
Tras su muerte, sería recordado con mucho cariño y respeto por la nación china. Su legado llegó a hacerle merecedor de un templo construido en su nombre durante la Dinastía Song (960-1279). El templo se construyó en la misma zona donde varios cientos de familias fabricantes de papel seguían produciendo papel para gran parte de China.
Hoy en día, Cai Lun es reconocido como el padre de la moderna industria del papel, así como el hombre que fue responsable de la difusión del papel en todo el mundo. Es difícil imaginar el estado actual de nuestra sociedad sin el papel como recurso fundamental para la transmisión y salvaguarda de información.
A pesar de ser un gran desconocido a nivel mundial, pocos inventores pueden presumir de un impacto tan profundo en la historia de la humanidad y en el propio desarrollo de la misma.